Yo!

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Venezuela
Soy yo, soy las fantasias, soy la realidad, soy "el principito", soy un dolor de cabza, pero soy yo. Y tengo un gran corazon. Amo la vida, amo los libros, amo la ilusion, amo la capacidad de surgir y de afrontar... Simple y sencillamente una gran sonrisa..

domingo, 11 de septiembre de 2011

UN LIBRO GASTADO... PROTAGONISTA DE MOMENTOS,

La aguja de zurcir.



Érase una vez una aguja de zurcir tan fina y puntiaguda, que se creía ser una aguja de coser.
- Fijaos en lo que hacéis y manejadme con cuidado - decía a los dedos que la manejaban -. No me dejéis caer, que si voy al suelo, las pasaréis negras para encontrarme. ¡Soy tan fina!
- ¡Vamos, vamos, que no hay para tanto! - dijeron los dedos sujetándola por el cuerpo.
- Mirad, aquí llego yo con mi séquito - prosiguió la aguja, arrastrando tras sí una larga hebra, pero sin nudo.
Los dedos apuntaron la aguja a la zapatilla de la cocinera; el cuero de la parte superior había reventado y se disponían a coserlo.
- ¡Qué trabajo más ordinario! - exclamó la aguja -. No es para mí. ¡Me rompo, me rompo! - y se rompió -. ¿No os lo dije? - suspiró la víctima -. ¡Soy demasiado fina!
- Ya no sirve para nada - pensaron los dedos; pero hubieron de seguir sujetándola, mientras la cocinera le aplicaba una gota de lacre y luego era clavada en la pechera de la blusa.
- ¡Toma! ¡Ahora soy un prendedor! - dijo la vanidosa -. Bien sabía yo que con el tiempo haría carrera. Cuando una vale, un día u otro se lo reconocen -. Y se río para sus adentros, pues por fuera es muy difícil ver cuándo se ríe una aguja de zurcir. Y se quedó allí tan orgullosa cómo si fuese en coche, y paseaba la mirada a su alrededor.
- ¿Puedo tomarme la libertad de preguntarle, con el debido respeto, si acaso es usted de oro? - inquirió el alfiler, vecino suyo -. Tiene usted un porte majestuoso, y cabeza propia, aunque pequeña. Debe procurar crecer, pues no siempre se pueden poner gotas de lacre en el cabo.
Al oír esto, la aguja se irguió con tanto orgullo, que se soltó de la tela y cayó en el vertedero, en el que la cocinera estaba lavando.
- Ahora me voy de viaje - dijo la aguja -. ¡Con tal que no me pierda! -. Pero es el caso que se perdió.
«Este mundo no está hecho para mí - pensó, ya en el arroyo de la calle -. Soy demasiado fina. Pero tengo conciencia de mi valer, y esto siempre es una pequeña satisfacción». Y mantuvo su actitud, sin perder el buen humor.
Por encima de ella pasaban flotando toda clase de objetos: virutas, pajas y pedazos de periódico. «¡Cómo navegan! - decía la aguja -. ¡Poco se imaginan lo que hay en el fondo!. Yo estoy en el fondo y aquí sigo clavada. ¡Toma!, ahora pasa una viruta que no piensa en nada del mundo como no sea en una "viruta", o sea, en ella misma; y ahora viene una paja: ¡qué manera de revolcarse y de girar! No pienses tanto en ti, que darás contra una piedra. ¡Y ahora un trozo de periódico! Nadie se acuerda de lo que pone, y, no obstante, ¡cómo se ahueca! Yo, en cambio, me estoy aquí paciente y quieta; sé lo que soy y seguiré siéndolo...».
Un día fue a parar a su lado un objeto que brillaba tanto, que la aguja pensó que tal vez sería un diamante; pero en realidad era un casco de botella. Y como brillaba, la aguja se dirigió a él, presentándose como alfiler de pecho.
- ¿Usted debe ser un diamante, verdad?
- Bueno... sí, algo por el estilo.
Y los dos quedaron convencidos de que eran joyas excepcionales, y se enzarzaron en una conversación acerca de lo presuntuosa que es la gente.
- ¿Sabes? yo viví en el estuche de una señorita - dijo la aguja de zurcir -; era cocinera; tenía cinco dedos en cada mano, pero nunca he visto nada tan engreído como aquellos cinco dedos; y, sin embargo, toda su misión consistía en sostenerme, sacarme del estuche y volverme a meter en él.
- ¿Brillaban acaso? - preguntó el casco de botella.
- ¿Brillar? - exclamó la aguja -. No; pero a orgullosos nadie los ganaba. Eran cinco hermanos, todos dedos de nacimiento. Iban siempre juntos, la mar de tiesos uno al lado del otro, a pesar de que ninguno era de la misma longitud. El de más afuera, se llamaba «Pulgar», era corto y gordo, estaba separado de la mano, y como sólo tenía una articulación en el dorso, sólo podía hacer una inclinación; pero afirmaba que si a un hombre se lo cortaban, quedaba inútil para el servicio militar. Luego venía el «Lameollas», que se metía en lo dulce y en lo amargo, señalaba el sol y la luna y era el que apretaba la pluma cuando escribían. El «Larguirucho» se miraba a los demás desde lo alto; el «Borde dorado» se paseaba con un aro de oro alrededor del cuerpo, y el menudo «Meñique» no hacía nada, de lo cual estaba muy ufano. Todo era jactarse y vanagloriarse. Por eso fui yo a dar en el vertedero.
- Ahora estamos aquí, brillando - dijo el casco de botella. En el mismo momento llegó más agua al arroyo, lo desbordó y se llevó el casco.
- ¡Vamos! A éste lo han despachado - dijo la aguja -. Yo me quedo, soy demasiado fina, pero esto es mi orgullo, y vale la pena -. Y permaneció altiva, sumida en sus pensamientos.
- De tan fina que soy, casi creería que nací de un rayo de sol. Tengo la impresión de que el sol me busca siempre debajo del agua. Soy tan sutil, que ni mi padre me encuentra. Si no se me hubiese roto el ojo, creo que lloraría; pero no, no es distinguido llorar.
Un día se presentaron varios pilluelos y se pusieron a rebuscar en el arroyo, en pos de clavos viejos, perras chicas y otras cosas por el estilo. Era una ocupación muy sucia, pero ellos se divertían de lo lindo.
- ¡Ay! - exclamó uno; se había pinchado con la aguja de zurcir -. ¡Esta marrana!
- ¡Yo no soy ninguna marrana, sino una señorita! - protestó la aguja; pero nadie la oyó. El lacre se había desprendido, y el metal estaba ennegrecido; pero el negro hace más esbelto, por lo que la aguja se creyó aún más fina que antes.
- ¡Ahí viene flotando una cáscara de huevo! - gritaron los chiquillos, y clavaron en ella la aguja.
- Negra sobre fondo blanco - observó ésta -. ¡Qué bien me sienta! Soy bien visible. ¡Con tal que no me maree, ni vomite! -. Pero no se mareó ni vomitó.
- Es una gran cosa contra el mareo tener estómago de acero. En esto sí que estoy por encima del vulgo. Me siento como si nada. Cuánto más fina es una, más resiste.
- ¡Crac! - exclamó la cáscara, al sentirse aplastada por la rueda de un carro.
- ¡Uf, cómo pesa! - añadió la aguja -. Ahora sí que me mareo. ¡Me rompo, me rompo! -. Pero no se rompió, pese a haber sido atropellada por un carro. Quedó en el suelo, y, lo que es por mí, puede seguir allí muchos años.

jueves, 6 de enero de 2011

CONFORMIDAD.. Arte de nadie.


“Conforme… Se dice de lo que tiene un parecido o semejanza que lo hace afín con algo; Se dice de lo que conviene a algo; Que se ha llegado a un punto de entendimiento y acuerdo con otros; Que se acepta hasta donde se llegó, que se sobrelleva co paciencia; Fórmula al pie de un escrito, aceptándolo”

“Conforme - Adj. Estar de acuerdo con otro en una misma cosa. Igual proporcionado. Resignado y paciente con las adversidades.”



Un día en la cotidianidad estaba viendo una novela, en unos d esos tantos
momentos de esta alguien le dijo al protagonista:

“SIEMPRE ASPIRA EL CIELO, AUNQUE TE QUEDES EN LAS NUBES” .

Fue una de las tantas frases en las que uno como televidente de ese medio se siente atraído y llamado como si fueras poseído con otro tipo de fe.
La sabiduría y los consejos siempre se encuentran dentro de cada persona , solo que a veces nos sentimos atraídos y maravillados como por ejemplo la frase anteriormente mencionada…
Alguien una vez me dijo, cito palabras textuales… que nunca iba a conformarme con nada… ahora nose si eso sea malo o bueno. En estos momentos de mi vida pienso que no es bueno ser conformista, pero si agradecidos.
Siempre tienes que buscar mas … porque el ser humano se maravilla ante los descubrimientos, logros, y la realización de estos logros. A medida que la vida va, tu aspiras regresar con un gran reconocimiento de verdades.
También vi en una película otra gran frase:
“ EL PASADO ES PASADO, EL FUTURO TODAVIA NO LLEGA, PERO EL PRESENTE ES UN REGALO… POR ESO SE LLAMA PRESENTE”.
Entonces es necesario ver una película, o leer un libro que te deje un gran mensaje para reconocer y actuar? … creo que no.
Conozco a alguien que se lanzo a lo que ella pensó que quería … y tiene lo que “queria” pero con el precio de sacrificar que?.
Todo en la vida comprende un sacrificio…pero cuando tomas entre tus manos lo que “querias”… (Pongo dentro de una señalación la verbo querer porque toda su alusión es relativa a cada momento o etapa de nuestras vidas…) de alguna manera t sientes bendecido …. Aunque no hay que dejar por fuera la parte de que el ser humano no es un ser conforme.
Mucha gente quizás podría decir me “ juzgo” , por leer un millón de veces el libro del principito … creo que es excelente, compleja , profunda y real obra . tiene 7 planetas cada uno de ellos habitados por diferentes caracteres, el buscaba descubrir y explorar, llego el a entender cuando “domestico”, y anhelo. Un lugar diferente por cada entendimiento, pero siempre para el mismo fin… el crecimiento de el mismo. Omito muchos detalles porque en la actualidad no lo recuerdo, pero es excelente lección de vida acompañada de la sutileza de la inocencia, una vez vi a alguien muy confundido e intente ayudar de alguna manera, pero esa persona era muy veloz , e impaciente para leer. Creo que leer es una oportunidad, pero saber leer es un arte… siempre quise leer como hipotéticamente leía “ Rory “ de Gilmore girls.. Amo su caracterización y lo que ella representaba.
Ahora pienso que tal seria si de repente llegara a ti una grabación de tu vida con diálogos protagonistas y todo lo surreal que este pensamiento suena… que pensarías si vieras tu serie? … te para tres…óleo de una mujer con sombrero…Yolanda…welcome to Tijuana..
Estarías tan a apresurado en adelantar los capítulos, porque son un real desastre? O algo no tan familiar en tu actualidad, pero te complacería verlos…”vida” una real obra e arte, tu vida!

Ahora nos planteamos otra disyuntiva… que tan grande seria el conformismo partiendo de que otras personas dependen de tus actos… ej: hijos, responsabilidades…

“El excesivo calor del verano, hace pensar compensatoriamente en el frío del invierno y a la inversa. Toda situación difícil hace evocar o imaginar a su antagónica, pero una vez en ella, vuelve la disconformidad. Entonces, la compensación nos lleva a su punto opuesto. Allí donde aparezca el sufrimiento, la compensación se pondrá en marcha, pero no por ello el sufrimiento mismo será vencido…”

Haciendo una recopilación rápida de mi vida, creo que siempre busque amor, aceptación, amistades, experiencias muchas experiencias … y ahora solo estoy aquí, buscando mas… creo que la lección mas apreciativa de toda mi historia seria... Que no eres tu solo… que las ondas de tus actos siempre terminan afectados a otros, igual que a ti mismo. Lo que nos conlleva a saber perdonarte, un gran don..pero lo tedioso de esa situación es que siempre vas a pensar en ti, una situación muy cíclica…

“ A veces lo que pasa es que a este mundo no se le entiende…”

“El me dio, el me quitó, bendita sea su voluntad"…